domingo, 10 de agosto de 2008

UN DÍA ... PARA APRENDER

Eran las 6 a.m. demasiado tarde para dormir y muy temprano para comenzar un nuevo día. Mar no había podido pegar ojo en toda la noche. Algo había invadido su cabeza de tal forma que no era capaz ni tan siquiera de conseguir la concentración mínima para cerrar los ojos y dejarse llevar por el cansancio acumulado.

Una y mil veces se pudo preguntar a lo largo de la noche, ¿que sensación tan extraña era la que presentía? ¿Que era aquello que sentía tan profundamente dentro de su ser? Ya no podía más, no hallaba explicación alguna y eso no hacía más que poner a prueba sus nervios.

Seguía con sus preguntas cuando sonó el despertador. Ya eran la 7 a.m., y eso la enfadó aún más, toda la noche sin dormir, no paraba de imaginarse con que cara se presentaría en la reunión que tendría horas después.
Se levantó de un salto, parecía imposible que habiendo pasado esas horas tan horribles, todavía tuviese energía en el cuerpo para andar tan hábil y ligera. Preparó la ropa en el vestidor y con paso firme se encaminó hacia la ducha. Todavía no se había dado cuenta, aunque no tardaría mucho tiempo más en percatarse de la situación. El tiempo justo que tardó en salir de la ducha y mirarse al espejo…

-¡no puede ser! ¿Qué diablos es esto?- Grito acelerada frente al espejo

Su reflejo era blanco y brillante, una luz intensa y cegadora la rodeaba por completo. Hizo mil gestos pretendiendo demostrarse a si misma que aún seguía durmiendo, pero no era así, estaba despierta.
Salió corriendo hacía la habitación, y allí estaba. Tendida sobre la cama, con las sábanas por encima, durmiendo placidamente. Su corazón estaba demasiado acelerado para poder pararse a pensar que estaba sucediendo…

-Buenos días. Te ruego no te asustes, no es lo que parece- susurro una voz que provenía de su espalda.
- ¿quién eres tu? ¿Qué está pasando?-
- Disculpa, no me he presentado, soy Unai. Y no está pasando nada-
- ¿Qué no está pasando nada? ¿Y que significa que yo este en mi cama y aquí hablando contigo?
- Tranquilízate, no es lo que tú crees. No estás muerta, simplemente han decidido que necesitabas un parón en tu vida, nada más-
-¿un parón? ¿por qué?-
- Creo que eso, te lo explicaré más tarde. De momento vístete, que yo prepararé el desayuno-

Mar estaba totalmente desconcertada y perdida, pero sabía que no podría hacer nada frente a esa situación. Estaba acostumbrada a controlarlo todo y esta vez, se veía superada por las circunstancias.

Mientras tanto Unai entro en la cocina y empezó a preparar un delicioso desayuno. Zumo, tostadas, bollos, café … no faltaba de nada. El insistía en desayunar bien, pues iba a ser un día muy duro…

2 comentarios:

Daniel Hermosel Murcia dijo...

¡¡pensé que era la continuación del relato anterior pero nooooo es uno nuevooooo!!

Vale, dos series al tiempo, espero que no tardes en continuar. ;)

Veronica dijo...

A las güenas, digo yo que me dará tiempo. Lo de las dos series, pues por variar un poquitin, de todas formas tu tranqui que yo sigo.

Aprovecharé ahora todo lo que pueda, total, he decidido tomarme un tiempo .... eterno.

 

Viviendo en mi burbuja © 2008. Chaotic Soul :: Converted by Randomness